Puratos Argentina: un caso de expansión e inversiones en un contexto adverso - Agencia VOX
15234
post-template-default,single,single-post,postid-15234,single-format-standard,ajax_fade,page_not_loaded,,side_area_uncovered_from_content,qode-theme-ver-10.1.1,wpb-js-composer js-comp-ver-5.0.1,vc_responsive

Puratos Argentina: un caso de expansión e inversiones en un contexto adverso

Puratos Argentina: un caso de expansión e inversiones en un contexto adverso

En medio de la crisis local, que pega con particular fuerza en la industria de la alimentación, la compañía destinará en 2019 1,5 millones de dólares en expandir y mejorar su infraestructura, un año en el que, además, amplió su planta de personal en un 14%. Panaderos, reposteros y chocolateros son los principales clientes de una empresa que, a nivel global, está en más de 70 países y que, en estas pampas, cumple 40 años de una historia de crecimiento constante, con perfil bajo, trabajo y apuesta por los valores humanos.

 

Puratos es un grupo internacional belga que provee materias primas y productos al mundo de la panadería, la pastelería y el chocolate. Es famoso, a nivel internacional, por haber inventado, a mediados de los 50, el “T500”, el primer mejorador del amasijo de pan y horneo no basado en bromato de potasio, que fue prohibido globalmente. También es conocido en el mundo por la calidad de su “chocolate real belga”, Belcolade, basado en una tradición en la chocolatería de aquel país europeo.

El Grupo Puratos tiene plantas de producción en todo el mundo. Fabrica en más de 70 países, y sus productos se pueden encontrar en más de 100. La filial de Puratos en la Argentina cumplió 40 años. Aunque los productos llegaban al país desde mucho antes, por un distribuidor, la empresa montó su planta a fines de los 70, en la zona del Delta del Tigre.

Su planta local estuvo 18 años en el Delta, desde donde se desarrolló con inusitada fuerza, pero en silencio y con perfil bajo. Tiene una historia rica, que alberga viejas leyendas plenas de épica y coraje, un ejemplo de crecimiento sostenido en la adversidad.

Puratos Argentina responde fielmente al modelo de valores de su compañía madre, una empresa global con 100 años de edad, que interactúa con el mundo, pero que a la vez no ha dejado de ser familiar. Todavía hoy dos miembros del directorio global de la compañía son hijos directos de los socios fundadores.

Las anécdotas que cuentan los empleados más antiguos acerca de cómo proveían de harina a la planta, mediante lanchas, son emocionantes. Y, no por casualidad, se emparentan con otras historias de esfuerzo y superación, que vienen de Grupo Puratos, donde narran cómo llega a sus plantas, por ejemplo, el cacao de la mejor calidad desde plantaciones en lugares tan recónditos como el México, Vietnam, Costa de Marfil.

Hoy la planta de Puratos se encuentra en «El Talar de Pacheco», en un predio de casi 15.000 mts2 que alberga una planta productiva conformada por dos secciones principales, una destinada a productos en polvo y otra destinada a baños de repostería y rellenos.

La llegada de los 40 años encuentra a Puratos Argentina en la misma senda de apuesta al crecimiento que domina su historia, aunque en un contexto, si se quiere, más difícil.

Sus planes de inversión no sólo que no se han detenido sino que se incrementaron, algo sorprendente si se tiene en cuenta que la industria de alimentos es una de las más golpeadas por la caída del consumo desde que se desató la crisis en el país.

Y esto ocurre, llamativamente, en todos los planos: en infraestructura o capital físico (CAPEX), sólo en 2019 la compañía terminará por desembolsar $ 1,5 millones dólares. El objetivo es duplicar la productividad en polvos y ampliar las bodegas de almacenamiento y el Centro de Innovación para recibir mejor a sus clientes y que en sus oficinas el personal trabaje mejor y en un ambiente más lindo y moderno.

Pero una empresa no es sólo edificios. Incluso, invertir en capacidad instalada en tiempos de crisis es menos sorprendente que hacerlo, por ejemplo, en recursos humanos. Y Puratos Argentina aumentó 14% su personal respecto del año pasado.

La apuesta de la compañía por la gente no se agota en las contrataciones, sino que se extiende a la capacitación, ya que destina el 1,3% de los ingresos en ese rubro.

En su Centro de Innovación se desempeñan las 20 personas que trabajan en investigación y desarrollo. Tampoco esto es casualidad. El budget destinado a I+D en 2019 fue 2,5% de los ingresos netos. Y la idea es mantener esa tasa. La empresa invierte, a su vez, en marketing el 2,5% de los ingresos.

Por otra parte, Puratos es mundialmente conocido por conservar la tradición de la masa madre. En Bélgica, cuenta con una biblioteca que alberga una colección única de masas madre de panaderos de todo el mundo y ha contribuido a la identificación de más de 700 tipos de levadura y más de 1,500 variedades de bacterias de ácido láctico.

Y habrá más: la empresa se encuentra en pleno lanzamiento del dulce de leche repostero Puratos.

 

Acerca de Puratos

El Grupo Puratos es una empresa familiar internacional que ofrece una gama completa de productos innovadores, materias primas de valor agregado y experiencia para los sectores de panadería, pastelería y chocolatería. Su sede se encuentra a las afueras de Bruselas (Bélgica), donde se fundó la compañía en 1919. Casi un siglo después, sus productos y servicios están disponibles en más de 100 países de todo el mundo, y en 70, son producidos por la red de filiales locales.

Puratos Argentina tiene 40 años de existencia y emplea a más de 100 personas.  Hoy la planta de Puratos se encuentra en «El Talar de Pacheco», en un predio de casi 15.000 mts2 que alberga una planta productiva conformada por dos secciones principales, una destinada a productos en polvo y otra destinada a baños de repostería y rellenos.

Su objetivo es ser los «socios confiables en innovación», ayudando a nuestros clientes en todo el mundo a entregar alimentos nutritivos y sabrosos a sus comunidades locales.